top of page
"Este proyecto nació desde el
corazón y la experiencia personal"
Cuidar de un ser querido es un acto de amor profundo, es dar sin medida, es estar presente en cada momento, en cada necesidad, en cada sonrisa y en cada desafío. Mi historia con el cuidado de adultos mayores comenzó en casa, con dos de las personas que más amé en mi vida: mi esposo y mi madre.
Mi esposo, un veterano de guerra, tenía derecho a ciertos beneficios que nunca aprovechamos, simplemente porque no sabíamos que existían. Durante dos años lo cuidé sola, sin apoyo ni descanso y no porque no quisiera, sino porque desconocía que podía recibir ayuda a través programas como Medicaid. Con mi madre, la historia fue similar. Durante años, me entregué a su bienestar, y cuando finalmente busqué apoyo, no encontraba en los cuidadores el mismo amor y dedicación que yo le brindaba y que ella merecía.
Fue después de su partida cuando descubrí que todo pudo haber sido diferente. Que existían recursos, programas y asistencia que hubieran aligerado mi carga y mejorado su calidad de vida. Nadie me informó, me aconsejó o me guió en ese proceso y con el tiempo descubrí que no era la única.
Y es por eso nació I Care: no solo para ofrecer cuidado a quienes lo necesitan, sino para hacerlo con el mismo amor con el que uno cuida a su propia familia. Mi compromiso es reclutar a personas con verdadera vocación de servicio, porque sé que el cuidado de un adulto mayor o de personas con necesidades específicas no solo es un trabajo, es una entrega de corazón. También quiero ser una guía para familias que, como yo, pueden estar pasando por este camino sin saber que existe ayuda disponible.
Aquí, cada persona importa, cada historia cuenta y sobre todo, aquí se cuida con amor.
bottom of page